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LECTURAS 8 Y 10 (Lectura 8 ((Fin Ultimo Para todas la religiones el…

LECTURAS 8 Y 10

Lectura 8

Fin Ultimo Para todas la religiones el sentido de vida es llegar a dios y vivir bajo sus leyes.

Comunidad Forma de vivir conjuntamente que han adaptado las religiones para mantener cosas en común.

Juicio Final Dictamen que hace dios sobre nuestras acciones en la vida terrenal.

Revelación Dios se presenta con la humanidad por voluntad propia para guiarnos.

Salvación Voluntad divina para expiar nuestros pecados.

Fraternidad Afecto y confianza entre diferentes religiones

Hinduismo Se relaciona con sus mitos y refugio en dios

Budismo: responden al corazón con ritos sagrados

Islam: Único dios, padre de Abraham, dios del juicio.

Judaísmo: Profetas, patriarcas, revelación divina, testamento.

Lectura 10

Infidelidad: Mediante la cual se pierde incluso la fe, y también se puede reflejar por cualquier otro pecado mortal.

Preceptos morales negativos: Prohíben algunos actos o comportamientos concretos como intrínsecamente malos, no admiten ninguna excepción legítima; no dejan ningún espacio moralmente aceptable para la creatividad de alguna determinación contraria.

Moralidad de los actos: Puede ser juzgada si se prescinde de la conformidad u oposición de la elección deliberada de un comportamiento concreto respecto a la dignidad y a la vocación integral de la persona humana.

Separar la opción fundamental de los comportamientos concretos: Significa contradecir la integridad sustancial o la unidad personal del agente moral en su cuerpo y en su alma.

Opción fundamental: Es cuando se actúa siguiendo elecciones conscientes y libres.

La llamada de Jesús «ven y sígueme» marca la máxima exaltación posible de la libertad del hombre y, atestigua la verdad y la obligación de los actos de fe y de decisiones que se pueden calificar de opción fundamental.

«Yo, el Señor, soy tu Dios»: Asegura a la moral de la Alianza una fisonomía de totalidad, unidad y profundidad.

Comportamiento humano: Balance entre dos niveles de moralidad: por una parte, el bien y del mal, que depende de la voluntad, y, por otra, los comportamientos determinados, son juzgados como moralmente rectos o equivocados haciéndolo depender del calculo técnico de la proporción entre bienes y males premorales o físicos, que siguen efectivamente a la acción.

La persona: Es aquella que decide sobre sí misma, en forma transcendental y atemática.

La libertad: induce a muchos a desarrollar un análisis más a fondo de su naturaleza y sus dinamismos.